Sistema compacto que puede realizarse con resinas o cemento. Su finalidad acostumbra a ser recrecidos, nivelaciones, pendientes o acabados.
Los morteros de resina se componen habitualmente de resinas epoxídicas 100% sólidos, exentas de disolventes y áridos con una curva granulométrica muy compensada formando una estructura muy cohesionada. Posee gran adherencia al soporte, con imprimación previa sobre soportes porosos (mortero, hormigón, etc), alta resistencia mecánica y a la compresión, endurecimiento sin retracción, elevada resistencia a la abrasión.
Los morteros cementosos están compuestos de cemento, áridos, y aditivos. Se caracterizan por un rápido fraguado, aplicables en soportes húmedos.
Ambos tipos de morteros se utilizan en recrecidos, nivelaciones, reparaciones de soporte, confección de pendientes, escaleras… Siempre es aconsejable finalizarlos con un acabado resistente.
